En 2003, el presidente Bush promulgó legislación sobre planes de ahorro para la salud. Para aquellos que no han oído hablar de ellos, no han oído lo suficiente sobre ellos o quieren saber más sobre ellos, aquí está la primicia.

En un esfuerzo por hacer que el seguro médico sea más accesible y conveniente para más personas, el gobierno ha establecido pautas que puede seguir para obtener una cuenta de ahorro especial libre de impuestos para gastos médicos. Los planes de ahorro para la salud están destinados a ser una alternativa al seguro de salud tradicional, que requiere pagos mensuales altos a cambio de deducibles bajos y cubre un número limitado de gastos más pequeños, como visitas al médico o medicamentos recetados.

En cambio, los planes de ahorro de salud requieren que tenga un plan de seguro con un pago mensual bajo y un deducible alto. Esto significa que paga de su bolsillo los gastos por debajo de su límite deducible, pero a cambio puede abrir una cuenta de ahorros para la salud. El dinero en estas cuentas (que algunas personas llaman ‘IRA médicas’) solo se puede usar para gastos médicos (los gastos más pequeños que no están cubiertos por su póliza de seguro) y el dinero no utilizado se acumula en la cuenta hasta que finalmente complemente su jubilación o sus gastos médicos después de la jubilación.

Para algunas personas, especialmente las personas que trabajan por cuenta propia, los depósitos en cuentas de ahorro para la salud son deducibles de impuestos; sin embargo, el saldo de su cuenta solo se puede aumentar en una cantidad fija (alrededor de tres mil dólares) por año.

Si bien no puede calificar para una cuenta de ahorros para la salud si tiene otras pólizas de seguro (sin deducible alto), existen algunas excepciones. Por ejemplo, se le permite tener planes de cuidado a largo plazo, dentales, de la vista, por discapacidad y para automóviles vigentes al mismo tiempo que su póliza de deducible alto; Los beneficios laborales no deberían impedirle calificar.

Si está interesado en obtener un plan de ahorros para la salud y abrir una cuenta de ahorros para la salud, puede hablar con su empleador o con su banco o cooperativa de crédito local. Además, muchos corredores de seguros están comenzando a involucrarse en el establecimiento de cuentas de ahorro para la salud. Encuentre a alguien en quien confíe para que lo asesore y oriente, ya que las regulaciones pueden variar de un estado a otro.