La quiebra es una decisión difícil de tomar. Debido a las circunstancias de la vida, una enfermedad crónica, un divorcio o la pérdida de un cónyuge, a veces es la mejor decisión financiera para una familia y su futuro financiero. Sobre la base de cambios económicos o familiares, salir de una bancarrota traerá cambios en el estilo de vida y la actitud.

La quiebra puede, en muchos casos, borrar la pizarra de la deuda. En el futuro, es importante pensar de manera diferente sobre la deuda, el crédito y los ahorros. No todas las personas que se declaran en bancarrota tienen dificultades para ahorrar o vivir dentro de sus posibilidades; sin embargo, para algunas, esto será un cambio de estilo de vida importante.

Después de una quiebra, el efectivo se convierte en la moneda número uno para negociar mientras se restablece un historial crediticio positivo. Hay varias empresas que están dispuestas a ofrecer tarjetas de crédito de alto interés, tenga cuidado con estas ofertas.

A menudo, los propietarios no tienen antecedentes de alquiler recientes disponibles para mostrar estabilidad, por lo tanto, si una casa se perdió en una quiebra, es posible que se requiera efectivo adicional para asegurar la vivienda. En raras ocasiones, se puede utilizar un cofirmante en lugar de un depósito más alto.

Es importante establecer buenos hábitos de gasto y ahorro, el uso del sistema de sobres puede resultar útil. Establece un presupuesto mensual. Cada día de pago, después de cobrar su cheque de pago, separe el dinero en sobres. Etiquete cada sobre con las facturas que vencen esa semana. Incluya un sobre para ahorrar. Es importante establecer una cuenta de ahorro creciente para emergencias.

Se ha comprobado que este sistema ayuda a redefinir el concepto de dinero. Nos permite ver que es una mercancía finita en lugar de una reserva ilimitada de dinero que no tiene que devolverse. Pagar las facturas a tiempo es un paso esencial para construir una base para obtener crédito en el futuro.

Las empresas saben que una vez que se ha declarado en quiebra, no puede volver a hacerlo durante 10 años. Tenga cuidado al aceptar nuevas obligaciones crediticias.

Si bien es importante comenzar a reportar entradas positivas en su informe de crédito, sea responsable y no use en exceso el crédito. Mantenga todos los saldos por debajo del 60% y, si es posible, cancele el saldo mensualmente.

Si su quiebra incluyó un plan de pago, es imperativo mantenerse en el objetivo para que la deuda se pague. Mantenga buenos registros y manténgase en contacto con los tribunales. Si su casa se salvó de una ejecución hipotecaria mediante un procedimiento de quiebra, podría volver a estar en peligro si los pagos no se realizan de acuerdo con el acuerdo de conciliación. Esto también es cierto para un vehículo que estaba al borde de la recuperación.

Es posible recuperarse de la quiebra. Comprenda su informe crediticio y controle su exactitud, informe errores y realice pagos a tiempo para asegurarse de que solo se informen las entradas positivas a partir de este momento. A medida que se registren más entradas positivas, comenzarán a pesar más que la quiebra. Haga un plan para un período de recuperación de dos años para mejorar su calificación crediticia después de una quiebra.