A medida que los precios de los alimentos, la gasolina, la ropa, los servicios médicos y los medicamentos recetados suben rápidamente, puede ser difícil para las personas que viven con un ingreso fijo mantenerse al día. Aquí hay algunas cosas que debe considerar si tiene dificultades para vivir con un ingreso fijo:

Controle sus gastos *. Si bien esto parece sencillo, es la mejor herramienta para mantenerse dentro de un presupuesto y reducir sus gastos. Es imposible realizar cambios en sus gastos diarios si no sabe a dónde va su dinero.

Lleve un diario. * Empiece un diario y anote todos los gastos que se realizan cada mes. Preste especial atención a los gastos no alimentarios y vea dónde puede haber lugares para recortar.

Haga que cada dólar cuente *. Vivir con una renta fija puede ser un desafío. Ahorre dinero en todas las áreas que pueda. Debe mantener su automóvil en buen estado y consolidar los viajes para ahorrar dinero en gasolina. Utilice cupones y aproveche las compras masivas cuando tenga sentido. Planifique sus comidas y haga que su hogar sea más eficiente energéticamente para mantener las facturas de alimentos y servicios al mínimo. Debe planificar sus compras y, en lugar de caminar al centro comercial para sus compras, investigue.

Encontrará descuentos del 30% o más para el mismo artículo comprando los clasificados o haciendo trueques siempre que sea posible.

Construya un fondo de emergencia. Tener un fondo de emergencia acumulado es esencial cuando se vive con ingresos fijos. Si termina teniendo un gasto no planificado, como reparaciones del automóvil o facturas médicas, los gastos de la tarjeta de crédito pueden escalar rápidamente fuera de control sin un fondo de emergencia. *

La forma más fácil de ahorrar dinero es convertirlo en una prioridad. Cuando llegue su cheque de pago el primer día del mes, su primer pago debe ser a su cuenta de ahorros. No espere hasta fin de mes e intente salvar lo que queda.

Algunas personas jubiladas están aprovechando sus dólares mudándose a áreas del país (y fuera del país) donde es más barato vivir. La Embajada de los Estados Unidos estimó en 2001 que había más de 600,000 estadounidenses viviendo en México y se estima que ese número ahora supera el millón. También hay una gran cantidad de jubilados que viven en Panamá, Costa Rica y Argentina.